martes, 9 de agosto de 2011

Pensar en la sociedad


La preocupación del arquitecto no son los planos, la casa, la belleza; la preocupación máxima (y primera) es la sociedad. ¿Cómo va a afectar a la humanidad lo imaginado en la cabeza? Por esto, no se tiene ningún derecho a soñar en la cabeza con cosas que no hagan avanzar a la humanidad. Los hombres y mujeres del mundo deberían vivir mejor, en igualdad y en paz, la arquitectura sólo es una pequeña parte, una pequeña aportación en nombre del hombre, pero hace falta resolver otros derechos de dignidad como una casa propia, el acceso a la cultura, una buena alimentación, una buena salud. Decía Ciriani: uno tiene que levantarse por la mañana con la idea de cambiar el mundo, si al final del día no se pudo, no se pudo pues.

"La arquitectura no es fantasía, no es irracionalidad, no es cualquier adefesio, cualquier garabato. No puede ser que ustedes a estas alturas del partido hagan composiciones así, feísimas, sin ningún sentido. ¿Qué les pasa? La composición se basa en dos criterios básicos, en pensarlos y a partir de los cuales se empieza a trabajar la idea; esos dos puntos son la proporción y la geometría. Nada es al azar".


Piñón dice: la ligeralización de la carrera, hoy en dia, estudiar arquitectura se ha convertido lo que en su época -en los cincuenta- eran la filosofía, las letras: a lo que las mujeres se metían porque podía ser bonito, creativo, colorido, Pinón dice que aunque no quisiera que fuese así, hay que admitir que tal vez, nunca más la arquitectura vuelva a tener el valor que tenía hace cuarenta,cincuenta años. Pero siempre hay una esperanza, como cuando las universidades interesadas en el lucro generan nuevas escuelas de arquitectura, ya hay tantas que ni quedan arquitectos porque ahora tienen que ser "profesores de arquitectura" , pero una nueva tal vez pueda ser la espectacular. Lo dudo.

Edison decía: "uno por ciento de inspiración y noventa y nueve por ciente de transpiración". Las ideas no vienen solas, las ideas no vienen sino, en medio del trabajo, del proceso, del boceto, nadie imagina cosas espectaculares y las pasa al papel. Nada sale de la nada. Para hacer las cosas bien hace falta trabajar todo el tiempo, La vida es objetiva, real. Decía Niemeyer: la vida es reír y llorar toda la vida, hay que aprovechar los momentos de tranquilidad y bromear un poco, después aguantar los demás. La vida es un soplo ¿no?.


Por Córdova



No hay comentarios:

Publicar un comentario